El apellido Gillespie es un sinónimo de jazz, y aunque Chris Gillespie no está emparentado con Dizzy, trajo a Bogotá todo el sentimiento del género y lo compartió con los asistentes a la celebración de los 100 años de EL TIEMPO, el pasado sábado, en la que fue el artista principal de la noche.
Gillespie, pianista oficial del Hotel Carlyle, de Nueva York, fue invitado por Roberto Pombo, director de EL TIEMPO, quien lo conoció en una de sus presentaciones y no dudó en convencerlo de que debía venir a Colombia.
Paradójicamente no es estadounidense, como lo sugiere el abolengo musical de su apellido: nació en Munich, Alemania; es hijo de padre danés y madre tanzania, y llegó a América para buscar los sonidos de las big bands, de Cole Porter y George Gershwin.el tiempoacademias de musica
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